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South Williamsport, Pensilvania— Yoshiuki Suzuki conectó dos jonrones al jardín contrario y Hamamatsu City superó ayer 9-6 a Maracay para avanzar a la final internacional de la Serie Mundial de Pequeñas Ligas, en la que enfrentará a México.
Japón está a dos victorias de defender la corona de la serie que conquistó en el 2010. En aquella ocasión lo logró con un equipo de Tokio.
El equipo venezolano tuvo la carrera del empate en la caja de bateo sin out, en la sexta entrada, después de un sencillo productor de Yonny Hernández. El relevista Gaishi Iguchi ponchó a los últimos dos bateadores para que Japón celebrara y eliminara a Venezuela.
En desventaja por 8-0, Venezuela redujo la diferencia a tres, luego que Elio Narváez coronó una ofensiva de cinco carreras en el inning mediante un leñazo de dos carreras por todo el jardín derecho.
“Nuestros bates no pudieron responder hoy. Nuestra ofensiva llegó muy tarde’’, dijo el manager Gustavo Narváez, tío de Elio. “Japón es un equipo muy bueno. Conectaron de foul muchos lanzamientos y agotaron a nuestros lanzadores’’.
Suzuki, de 12 años, conectó el primero de sus dos jonrones en la tercera entrada, que deparó tres rayitas a la causa de Japón.
Más tarde, Huntington Beach, California, estropeó la fiesta de Pensilvania, al vencer 2-0 a los héroes locales de Clinton County.
California se medirá a Billings, Montana, en la final estadounidense, prevista para el sábado.
El lugar de Japón en la final internacional quedó definido, en buena medida gracias a los potentes batazos.
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