sábado, 16 de julio de 2011

Diego Forlán ya se saborea el clásico

ELUNIVERSAL.COM.MX

BUENOS AIRES.— Diego Forlán se frota las manos mientras respira intensamente el encuentro de cuartos de final entre Uruguay y Argentina. “Son grandes partidos, los saboreamos igual que lo hacen los fans, siempre uno sueña con jugar este tipo de clásicos”, explica el charrúa, quien obtuvo el Balón de Oro al mejor jugador del Mundial Sudáfrica 2010.

“Nosotros sabemos que va a ser un partido duro. Contra Argentina son partidos complicados, de ida y vuelta, con grandes jugadores, así que vamos a tener que tener mucho cuidado y hacer un buen partido para poder pasar”, calcula el ídolo uruguayo, convencido en que el futbol de su selección ha ido de menos a más en la Copa América 2011, lo que les puede pemitir dar la sorpresa hoy en Santa Fe ante el anfitrión y gran favorito para llevarse el torneo que organiza la Conmebol.

“Ojalá que sí, es lo que queremos. Nos urge ganar para poder pasar, así que sabemos que va a ser un encuentro complicado”, dice convencido.

Charrúas y albicelestes se van a medir, luego de que avanzaron en idénticas circunstancias en sus respectivos grupos, sin perder ningún encuentro mas con un par de empates y un solo éxito. Los de casa lograron su clasificación al despachar a la débil Costa Rica, parchada con una selección de menores, dada la exigencia de Concacaf. Y en la misma línea la garra celeste tuvo que sufrir frente a la oncena mexicana, la cual estaba incluso más minada, con una base de elementos entre 20 y 22 años.

Aunque Forlán se encuentra tranquilo: “Sí, sí, llevo muchos años en esto y no es la primera vez que paso por estas situaciones”, comparte, respecto de la presión que se vive y la falta de efectividad en este torneo.

“Ante México, la verdad es que tuvimos situaciones que no se convirtieron, pero a veces también es importante tenerlas. Es más preocupante cuando no las tienes”, argumenta el futbolista, mientras emplea una mirada desafiante hacia el entrevistador, como si jugara otro partido fuera del campo.

“Nos costó quitarle la pelota a los mexicanos, la verdad, pero el haber encontrado el gol en el primer tiempo nos dio mayor tranquilidad”, arguye.

Mejor rival, imposible

En la misma tónica, Diego Pérez, mediocampista y recuperador del representativo uruguayo, anhela enfrentarse a los argentinos.

“Nuestra selección va creciendo y por lo general siempre es así. Nos ha tocado sufrir y ante Argentina no va a ser la excepción. Indudablemente es un clásico”.

Pérez asegura que lo ocurrido en los duelos anteriores, sobre todo contra el Tri, les da la base para lo que viene.

“Lo que veníamos a buscar contra México era pasar de fase, sabíamos que iba a ser complicado porque íbamos a jugar contra un rival con poco chance de pasar. Uruguay tenía que ganar sí o sí, entonces son partidos más duros, se logró, por momentos se jugó bien, pero el rival se nos vino en el segundo tiempo. Nos faltó el segundo gol que nos diera tranquilidad, mas lo importante es que se clasificó”.

Seguro de la capacidad de Uruguay, señala que el representativo conserva intactos los argumentos futbolísticos que catapultaron al equipo a la ronda de semifinales del Mundial pasado, lo que constituye una alerta roja para los anfitriones, quienes se sacaron la rifa del tigre en la ronda de cuartos de final.

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