sábado, 22 de octubre de 2011

Sanan heridas


DIARIO.COM.MX

Charllotte, Carolina del Norte— Hubo un tiempo en que el receptor Steve Smith y el esquinero de Angelo Hall tenían una de las enemistades más intensas de la NFL.

Quizá ya hayan madurado o el tiempo se encargó de sanar viejas heridas, pero ahora parece que los dos veteranos se tienen un gran respeto como jugadores. Si acaso pudiera haber un poco de lenguaje agresivo entre los dos, sería en el campo de juego, cuando las Panteras de Carolina de Smith reciban a Hall y a los Pieles Rojas de Washington mañana.

La antigua enemistad llegó a su punto más alto en 2006, cuando Hall dijo que Smith había anotado un “touchdown por casualidad” en su contra.

Smith respondió calificando a Hall de un “bufón de corte”.

Los ataques fuera del campo condujeron a un altercado físico sobre éste el 23 de septiembre de 2007, cuando Smith incitó a Hall, entonces miembro de los Halcones de Atlanta, a que cometiera tres faltas que le costaron 37 yardas en la misma serie. Lo anterior condujo a su vez a que las Panteras empataran el partido que terminarían por ganar 27-20 en el Georgia Dome. La siguiente semana, Hall fue dejado en la banca.

Esta semana, los dos comentaron que esas peleas son cosa del pasado.

Hall elogió a su adversario, indicando que Smith está de nueva cuenta en uno de los puntos más altos de su carrera. Hall, ahora en su cuarta temporada junto a los Pieles Rojas, calificó a Smith –líder de la NFC en yardas recibidas– como “el mejor receptor abierto de la liga libra por libra”.

También minimizó la enemistad del periodo cuando jugaban en la NFC Sur.

“No creo que nos desagradáramos del todo”, dijo Hall. “Somos competidores por naturaleza y nos parecemos mucho en ese sentido. Queremos sacar lo mejor del otro e intentar vencerlo. Eso seguramente no va a cambiar. El domingo será prácticamente lo mismo.

“Va a intentar imponerse sobre mí y yo haré lo mismo”.

Smith se mostró un poco desconcertado por los cumplidos de Hall, pero comentó que enfrentará a su enemigo como si se tratara de cualquier otro partido.

“Es un buen contrincante y puede jugar”, dijo Smith. “Así que hay que estar listos para jugar. Pero para mí es como si jugara contra Charles Woodson, Brent Grimes, Dunta Robinson o cualquier otro esquinero de la liga”.

Smith, ahora de 32 años y haciendo su mejor esfuerzo para disfrutar de sus últimos años en la NFL, comentó no tener alguna motivación adicional para vencer a Hall, indicando que podría hacer del partido una batalla de uno contra uno pero que prefiere no hacerlo.

“No tengo tiempo”, comentó Smith. “Tengo muchas otras cosas que hacer como ver repeticiones”.

Smith va al frente de la NFC en cuanto a yardas aéreas y yardas por recepción rumbo a la séptima semana de la temporada, promediando más de 112 yardas por partido.

“Está jugando como pocos”, dijo Hall. “Está jugando al mismo nivel de cuando solíamos enfrentarnos. Sé que estará en Hawai (en el Pro Bowl) a finales de año. Está haciendo jugadas y es muy tenaz.

“Ha tenido algunos problemas de mariscales a lo largo de los años, pero está de regreso”.

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