ESPN.COM.MXSAN LUIS -- Lo menos que Jaime García se imaginaba en su bautizo de Serie Mundial era que le dijeran que le iba a seguir los pasos a Fernando Valenzuela.
"¿De veras? Esa es una gran noticia. No lo sabía", respondió García cuando le mencionaron que se convertirá en apenas el segundo lanzador de México en abrir un juego del Clásico de Otoño.
El otro fue el "Toro" Fernando Valenzuela, un zurdo como él. Valenzuela tenía 20 años cuando en 1981 lanzó un juego completo ante los New York Yankees. Fue la temporada de la "Fernandomanía".
Treinta años después, aparece otro mexicano como abridor. García, de 25 años y dos campañas de servicio, tendrá la responsabilidad el jueves por los Cardenales de San Luis en el segundo juego del duelo frente a los Vigilantes de Texas.
"Esto realmente me emociona y me hace sentir muy orgulloso. No sabía nada. Lo supe cuando me le preguntaron ayer", dijo García el miércoles. "Estoy contento de saberlo y saldré a representar al equipo, mi familia, mi ciudad (Reynosa) y todo el país de México. Sé que están pendientes".
Lo bueno para García es que su primera presentación en una Serie Mundial será en el bastión de su equipo, el Busch Stadium.
Resulta que existe una enorme brecha de rendimiento entre sus aperturas en casa y las de visitante.
Durante las últimas dos temporadas, García exhibe foja de 15-8 en el Busch y su efectividad es un resplandeciente 2.17.
Entre los lanzadores que han cubierto por lo menos 150 innings de local las últimas dos campañas, sólo otro abridor supera a García en cuanto a efectividad en casa. Se trata de Jered Weaver, con 1.85 para los Angelinos de Los Angeles.
La historia es opuesta cuando está afuera: su récord es de 11-7 y la efectividad se dispara a 4.26.
García reconoce que se siente más cómodo al lanzar en su propio estadio.
"Claro que sí, por los fanáticos, el que duermas en tu propia cama, cosas así", dijo. "Pero siempre estoy diciendo que es algo que evito que me afecte en cuanto a ponerme a pensar cosas negativas cuando salimos de gira ... Yo no le encuentro nada diferente, pero no hay duda que aquí me va bien y me gusta".
El manager Tony La Russa tiene en cuenta la tendencia de García, positiva en San Luis y negativa de visita.
"Es lo que hay", señaló. "No existe motivo para que no pueda lanzar bien cuando está afuera. Ha mostrado que tiene el aplomo y lo demás. Pero hay que buscar una ventaja y tienes que tomar en cuenta ese variante".
Hasta ahora, García no ha brillado en sus tres aperturas de postemporada. Permitió las tres carreras en una derrota 3-2 ante Filadelfia, toleró seis carreras en cuatro innings contra Milwaukee en la serie de campeonato de la Liga Nacional y luego diseminó siete hits en cuatro innings y dos tercios en el quinto juego frente a los Cerveceros.
Sus salidas han sido cortas, con La Russa sin contemplaciones para sacarlo del montículo y apelar al relevo a la primera señal de que está en problemas.
García trata de tomarse con serenidad la situación.
"Cada vez que sales, uno quiere llegar lo más lejos. Todo pitcher abridor te dice que si no lanzas seis innings, pues le fallaste al equipo", dijo. "Pero estos son los playoffs y nosotros tenemos un bullpen muy fuerte".
"Me voy enfocar en el juego hasta que él me saque. No importa los innings que sea, el tercero o el noveno", añadió.
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