ESPN
MÉXICO -- Pese a que no quiso entrar en polémica ni estallar en contra del árbitro Erim Ramírez, el técnico de Toluca, el uruguayo Wilson Graniolatti, señaló que un equipo grande como América no necesita ayuda extra para conseguir un resultado.
"No me gusta ser tan drástico (para decir que fue un robo), creo que, como se dijo en la semana, con todo respeto, es un juego de dos equipos grandes y creo que ninguno de los dos necesita algún factor externo para salir con el triunfo o, en este caso, con el empate", dijo.
Reconoció, sin embargo, que debido a que una victoria se les escapó de las manos como resultado de una mala decisión del cuerpo arbitral, el empate 1-1 resultó muy molesto.
"Es lamentable que un error humano (comprometa un resultado), cuando son errores así que influyen en el resultado sí duele. No soy quién para juzgar, sí molesta porque fue una jugada muy evidente, no he visto la repetición, me hace falta verla, sí molesta, obvio que sí, cuando los errores los comete uno hay que corregirlos", expresó.
Aceptó que fue un partido muy difícil para el cuadro mexiquense, sobre todo en los primeros 45 minutos, en los que fue ampliamente dominado por el América.
"En el primer tiempo nos costó mucho encontrarnos con el balón, con las marcas del rival, cosa que se pudo corregir en el segundo tiempo", exclamó.
Finalmente, pese a que se le fueron los tres puntos, aseguró que se va "muy contento por la reacción del equipo, por cómo se están brindando que es el patrón principal para después ver el asunto deportivo, pero la dedicación que ha tenido este grupo golpeado desde hace tiempo es algo ya muy positivo para mí".
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