MINNEAPOLIS Brett Favre expuso claramente las razones de por qué anunció que regresaba. Y está de vuelta, quizás mejor que nunca.
Cuatro -sí, cuatro- pases de touchdown del quarterback de 40 años pusieron el domingo a los Vikings a un partido de llegar al Super Bowl con una paliza de 34-3 sobre los Cowboys de Dallas que les permitió avanzar al partido por el título de la Conferencia Nacional.
Cinco meses después de dejar el retiro por segundo año consecutivo en busca de ganar otro campeonato, Favre hizo conexión con Sidney Rice para tres anotaciones mientras Ray Edwards encabezó el acoso defensivo sobre Tony Romo.
Favre y los Vikings (13-4) enfrentan el próximo domingo a los Saints en Nueva Orleáns, y el ganador estará en el Super Bowl, justo el objetivo de Favre en la temporada y el motivo para dejar el retiro por segunda campaña en fila.
"Hoy fue como esta temporada; fue maravilloso", describió Favre. A la pregunta de si tuvo un encuentro emotivo, respondió: "Ahora estoy un poco agotado, pero sí. Fue emotivo antes del partido".
Los espectadores se desbordaron en exclamaciones al final del cuarto período, cuando Favre lanzó un pase a Visanthe Shiancoe que fue el cuarto del día y su mejor registro personal en postemporada. Nunca en 22 partidos anteriores de playoffs había lanzado para tantos touchdowns.
"Ha estado jugando con mucho entusiasmo", señaló el defensive end Jared Allen.
Favre completó 15 de 24 pases con un avance de 234 yardas para finalmente vencer a Dallas en la postemporada, mientras Romo se vio con el rostro inexpresivo en la banca entre las posesiones de la segunda mitad después de perder tres balones en el partido contra su equipo favorito en la niñez.
Romo fue capturado seis veces, tres por Edwards, perdió dos de tres balones sueltos y lanzó un balón de intercepción que fue directo hacia Ben Leber en la profundidad de su terreno en la parte final del tercer cuarto, lo cual preparó un gol de campo.
Después de ganar 118 yardas en el primer período, los Cowboys consiguieron sólo 130 en el resto del encuentro y se les apagó el entusiasmo de su primera victoria en playoffs en 13 años que lograron la semana pasada.
Romo terminó completando 22 de 35 pases para 198 yardas, pero pese a sus buenas actuaciones en esta campaña su falta de precisión en el Metrodome será muy recordada. La vez pasada que Dallas ganó un partido de postemporada fuera de casa fue en el campeonato de la Nacional después de la campaña de 1992.
Cuatro -sí, cuatro- pases de touchdown del quarterback de 40 años pusieron el domingo a los Vikings a un partido de llegar al Super Bowl con una paliza de 34-3 sobre los Cowboys de Dallas que les permitió avanzar al partido por el título de la Conferencia Nacional.
Cinco meses después de dejar el retiro por segundo año consecutivo en busca de ganar otro campeonato, Favre hizo conexión con Sidney Rice para tres anotaciones mientras Ray Edwards encabezó el acoso defensivo sobre Tony Romo.
Favre y los Vikings (13-4) enfrentan el próximo domingo a los Saints en Nueva Orleáns, y el ganador estará en el Super Bowl, justo el objetivo de Favre en la temporada y el motivo para dejar el retiro por segunda campaña en fila.
"Hoy fue como esta temporada; fue maravilloso", describió Favre. A la pregunta de si tuvo un encuentro emotivo, respondió: "Ahora estoy un poco agotado, pero sí. Fue emotivo antes del partido".
Los espectadores se desbordaron en exclamaciones al final del cuarto período, cuando Favre lanzó un pase a Visanthe Shiancoe que fue el cuarto del día y su mejor registro personal en postemporada. Nunca en 22 partidos anteriores de playoffs había lanzado para tantos touchdowns.
"Ha estado jugando con mucho entusiasmo", señaló el defensive end Jared Allen.
Favre completó 15 de 24 pases con un avance de 234 yardas para finalmente vencer a Dallas en la postemporada, mientras Romo se vio con el rostro inexpresivo en la banca entre las posesiones de la segunda mitad después de perder tres balones en el partido contra su equipo favorito en la niñez.
Romo fue capturado seis veces, tres por Edwards, perdió dos de tres balones sueltos y lanzó un balón de intercepción que fue directo hacia Ben Leber en la profundidad de su terreno en la parte final del tercer cuarto, lo cual preparó un gol de campo.
Después de ganar 118 yardas en el primer período, los Cowboys consiguieron sólo 130 en el resto del encuentro y se les apagó el entusiasmo de su primera victoria en playoffs en 13 años que lograron la semana pasada.
Romo terminó completando 22 de 35 pases para 198 yardas, pero pese a sus buenas actuaciones en esta campaña su falta de precisión en el Metrodome será muy recordada. La vez pasada que Dallas ganó un partido de postemporada fuera de casa fue en el campeonato de la Nacional después de la campaña de 1992.
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